La golpiza que recibió Jonathan Iván, uno de los jóvenes que volvían de jugar basquetbol en la colonia Aztecas de Toluca el pasado lunes por la noche, a manos de elementos de la Secretaría de Seguridad del Estado de México, le ha cambiado la vida en 180 grados; hoy esta postrado en un hospital luchando por su vida. Familiares y amigos, acusan detención ilegal y exigen justicia; la autoridad justifica actuar de policías y no ve nada ilegal.
A raíz de la paliza que policías estatales propinaron a Jonathan dentro de una patrulla durante el trayecto hacia el Ministerio Público, sus riñones y corazón presentan daño severo y parálisis corporal, de acuerdo con su familia.
Debido a la saña con la cual fue golpeado, al momento de ser presentado ante funcionarios de la fiscalía no fue recibido, en ese momento, fue canalizado a un hospital.
La Secretaría de Seguridad del Estado de México sostiene que Jonathan Iván se resistió a una revisión de seguridad y trató de desarmar a un uniformado no corresponde con saña con la que los policías reaccionan ante la presencia de los jóvenes; lo que hace pensar a familiares y amigos que se trata de un abuso de autoridad; el actuar de los policías quedó documentado en video, y difundido a través de redes sociales.
«El pasado día lunes por la noche a ellos simplemente los privaron de su libertad, iban transitando hacia nuestro domicilio, venían de jugar basquetbol y estas personas simplemente los abordaron, los golpearon, los esposaron, sobre todo, a Jonathan lo sometieron entre cinco personas, cinco delincuentes, le dieron unas descargas con el arma eléctrica, debido a los daños que le hicieron él tiene unos daños motrices que hasta el día de hoy sigue hospitalizado», sostienen familiares.