La administración municipal de Toluca, que preside el alcalde Juan Rodolfo Sánchez Gómez, continúa con la campaña de concientización sobre el uso del cubrebocas como herramienta que auxilia en la reducción del riesgo de transmisión del COVID-19, por la que se distribuye medio millón de mascarillas a los sectores más vulnerables de la población.
Las autoridades dela capital recuerdan que el cubrebocas sirve como protección a quien lo porta y a los demás, por lo que si es necesario salir de casa es obligatorio utilizarlo en espacios públicos.
Cabe recordar que el pasado 6 de julio los integrantes del Cabildo de Toluca aprobaron la obligatoriedad de su uso para toda la población en espacios públicos, como medida sanitaria en esta etapa del confinamiento.
Quien incumpla con esta disposición del Bando Municipal se hará acreedor a una multa de hasta 2 mil 600 pesos y arresto inconmutable de hasta 23 horas, con lo que se busca salvar el mayor número de vidas posible tras la reapertura parcial de actividades.
Sin embargo, de acuerdo con la autoridad local, más que sancionar se trata de que la población esté consciente de que al portar el cubrebocas nos cuidamos todos, con lo que coadyuva a que el semáforo epidemiológico cambie paulatinamente hasta llegar a verde; de lo contrario, podría haber un retroceso y volver a semáforo rojo.
Además del uso de este aditamento, se deben fortalecer las medidas como el lavado frecuente de manos, la sana distancia y el uso de gel antibacterial, entre otras, que favorecen la reducción de la propagación del virus SARS-CoV-2.
En el marco de la nueva normalidad, debe entenderse que el uso del cubrebocas es ya parte de la vida diaria de los toluqueños, además de auxiliar en el cumplimiento del derecho a la salud.