Alfredo Barrera Baca, rector de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM) hizo un llamado a los distintos niveles de gobierno para trabajar a favor del derecho de los jóvenes mexiquenses a la educación durante su segundo informe de labores; el gobernador Alfredo del Mazo Maza se compromete a continuar aumentando los recursos estatales que se le entrega a la institución año con año.
Justo a la mitad de su rectorado, Barrera Baca le imprime su toque personal a este ejercicio de transparencia, al dar los avances de su gestión en el patio del Cincuentenario del edificio de Rectoría, acompañado de su familia e invitados oficiales.
Dando el justo reconocimiento a alumnos y académicos que en este último año lograron aportaciones de relevancia para la universidad en áreas como la ciencia, tecnología, cultura y deportes.
La universidad no es opaca, ni derrochadora -expresó- el rector al abundar en el capítulo de las finanzas donde dejó claro que en últimos dos años se le aplicaron 74 auditorías académicas y administrativas, además de las realizadas por el Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México, y la Auditoría Superior de la Federación, está última dio como resultado que se tengan 24 observaciones en seguimiento, 19 procedimientos están sin responsabilidad y 19 procedimientos resarcitorios.
Durante su rectorado uno de los cuestionamientos más duros han sido en el tema de las finanzas, por lo que durante este segundo ejercicio de transparencia el rector reveló que el presupuesto destinado para cada universitario, vía recursos estatales y federales es de 52 mil pesos anuales, en tanto otras instituciones con menor matrícula y resultados, ocupando el vigésimo segundo lugar de 100 universidades por la cantidad de recursos públicos que recibe.
Por ello, hizo un llamado a los poderes estatales a trabajar en coordinación para mejorar los resultados de la universidad y sus finanzas, reconociendo que diste un déficit debido a la creciente población de jóvenes en la entidad que deben ejercer su derecho a la educación, por lo que requerimos de un presupuesto más justo.
Otro momento destacable fue cuando habla de la autonomía institucional la que dijo le da sentido a la universidad de manera digna, honesta y solidaria, la dota de consciencia y responsabilidad histórica.
La autonomía transformada en un hecho social es un cúmulo de valores y conocimientos que la universidad pone al servicio de la sociedad, por ello es que la autonomía universitaria no es ni coto, ni escondrijo, por ello es importante que juntos impulsemos el diálogo, la prudencia y la apertura de conciencias, la sensatez y la voluntad para que nuestra universidad sea fuerza motora de la transformación social.
La autonomía es más fuerte, visible y protegerá cuando se suman el poder ejecutivo y el legislativo, juntos fortalézcanos a la autonomía porque es condición para hacer educación de calidad, preservémosla porque sin ella la universidad puede está antes en el dogma por intereses parciales.
Prodigamos haciendo de la autonomía terreno fértil para que intelectuales y artistas continúen cumpliendo con su función crítica ante todo fenómeno social pero sobre todo hablamos el camino para seguir cumpliendo lo que la sociedad y la patria solicita de la universidad pública, conocimiento, soluciones accesibles, profesionistas competentes y ciudadanos ejemplares.