¡Perdí mi empleo!, ¡No entré a la universidad!, ¡Me terminó mi novio (a)¡, ¡Murió mi hijo!, ¡Murió mi padre!, son algunas de las situaciones por las cuales las personas deberían de acudir al sicólogo por lo menos dos veces al año para ayudarlos a lidiar con el dolor y la tristeza; sin embargo algunos optan por el suicidio, situación que lo convierte en un grave problema de salud pública.
Víctor Torres Meza, director del Centro Estatal de Vigilancia Epidemiológica y Control de Enfermedades en el Estado de México alertó a la población para detectar conductas que pudieran conducir a una persona a quitarse la vida, sobre todo, porque cada día son más jóvenes e inclusive niños quienes deciden hacerlo.
El año pasado se registraron 666 suicidios en la entidad, lo que muestra un aumento considerable con la cifra de hace 10 años, donde se registraba que 230 personas se quitaban la vida; no sólo eso también la edad disminuyó.
“Hace 10 años quienes más se suicidaban eran los viejitos con enfermedades crónicas, en situación de soledad, hoy es el joven que no tiene empleo, que lo dejó la novia, que es violentada en su caso en promedio entre 24 y 25 años de edad, casi todos culminan con su vida en su casa y por ahorcamiento”, explicó el doctor.
Por ello es necesario poner atención a las señales que se pudieran manifestar en un persona con intención de suicidarse, como depresión, cuestionar qué pasaría si él o ella ya no estuviera, y aunque no es un factor común el consumo de alcohol o drogas pueden generar que se tome la decisión de quitarse la vida más rápido.
También alertó este tipo de juegos que se dan en las redes sociales, como el de la Ballena Azul, el cual puede hacer que los adolescentes y niños también realicen un suicidio inducido, por lo que es necesario poner atención, también supervisar lo que los jóvenes están buscando en internet.
Reconoció que dentro de una familia también puede darse varios suicidios, por lo que es importante considerar los antecedentes de un personas, pues es posible que dentro de este círculo puedan registrarse varios casos.
Torres Meza destacó la importancia de visitar el sicólogo por lo menos dos veces al año para procurar la salud mental, y dejar de estigmatizar a las personas que recurren a un especialista, pues finalmente para enfrentar la pérdida de un pariente, un asalto, el desempleo se necesita de un especialista.