El aborto clandestino es un grave problema de salud pública en el Estado de México, ante la falta de su legalización o las mexiquenses exponen sus vidas en clínicas clandestinas, donde por 150 pesos, les practican procedimientos insalubres y riesgosos que pueden provocarles perder la vida.
Esperanza Arias Velázquez, presidenta en la entidad de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos en México (ddeser) urgió a la cámara de Diputados discutir la despenalización del aborto, ya que actualmente ni las tres caudales legales por las que es permitido se aplican.
“Tenemos casos de niñas, una de 10 años que fue violada y quedó embarazada, sin embargo no le practicaron el aborto al que por ley tenía derecho, por lo que se tuvo que trasladar a la Ciudad de México para que la ayudarán, pero este caso no es exclusivo”, expresó.
A decir de los activista, es necesario entender que cuando una mujer está decidida a abortar, difícilmente cambiará de opinión, por lo que las estrategias de salud deben cambiar, y ayudarlas a conservar su vida.
En el 2013 el aborto representó el 8.9% del total nacional de muertes maternas, convirtiéndose en la cuarta causa de muerte entre las mujeres, sin olvidar que por este motivo varias han sido juzgadas y encarceladas, tan sólo por abortar de manera espontánea.
“En el Estado de México no hay mujeres encarceladas por practicarse un aborto o tenerlo de manera espontánea, pero 8 casos que atiende esta organización han tenido que ampararse para no ir a la cárcel por esta causa”, comentó Arias Velázquez.
Hasta el momento el tema de la despenalización sólo ha funcionado como bandera política, como lo propuesto hace tres años por el partido del Trabajo (PT) y ahora por el de la Revolución Democrática (PRD) pero ninguno profundiza, ni realiza fotos para continuar con una discusión y legalizarlo.