Establecer horarios, continuar con hábitos y rutinas en casa permitirá que los niños se sientan en un ambiente seguro y tranquilo. Existen distintas formas de mantener estas estructuras sin que los niños sientan que están de vacaciones. Recordemos que éstas se refieren al cambio de actividad y a la desconexión de la tarea principal (en este caso, el colegio), pero no significan “no hacer nada”, más cuando se tratan de factores implicados en su crecimiento.
En el marco del Día del Niño, que se conmemora el próximo 30 de abril, el doctor Arturo Ayala Estrada, Endocrinólogo Pediatra con práctica privada en Metepec, comentó: “En ocasiones los padres consideran que su hijo es bajito, pero ¿cuándo hay que empezar a preocuparse por la talla del niño? La velocidad a la que crecen los niños no es constante a lo largo de la infancia y puede variar mucho, incluso en periodos de tiempo muy cortos; por ello, es importante saber si el crecimiento de un niño en un intervalo de tiempo dado es normal o no, ya que, en condiciones normales, la talla adulta es atribuible a factores genéticos”.
Cualquier enfermedad severa, así como el estrés o algún trauma emocional, pueden tener un efecto adverso sobre el crecimiento de los niños, de allí la importancia de realizar actividades durante este periodo en casa que permita se desenvuelvan creativamente y que no se vean afectados por el nivel de estrés que viven los adultos.
“Durante este periodo los padres pueden identificar de manera muy sencilla si sus hijos continúan creciendo de manera normal, basta con observar si continúan utilizando la misma talla de ropa o zapatos, también pueden marcar en alguna pared que designen el crecimiento de los niños semana con semana o bien, pueden hacer el cálculo de la Talla blanco familiar, es decir, de la estatura que por herencia genética pueden tener los hijos”, señaló el Doctor Ayala. Para ello, recomendó hacer la siguiente operación aritmética:
Estatura del padre más la estatura de la madre, el resultado dividirlo entre dos. Al resultado obtenido se le suman 6.5 centímetros para el caso de los hijos, y en caso de hijas se le resta 6.5 centímetros. Esa es la estatura ideal y saludable que deberían tener los hijos.
Adicionales a la herencia genética, la talla de los niños también depende de otros factores como la alimentación, la presencia de alteraciones genéticas, en particular de los déficits hormonales de crecimiento, y de algunas enfermedades durante los periodos del «estirón». De ahí que el especialista diera las siguientes recomendaciones para favorecer el sano crecimiento de los niños:
1. Elegir una dieta diversa y balanceada, designando un día a la semana para comer golosinas, sin caer en excesos.
2. A toda edad es bueno al menos 30 minutos de ejercicio. Hoy existen muchas clases virtuales que pueden seguirse desde casa, incluso en familia se pueden realizar estiramientos o diferentes rutinas.
3. Procurar que despierten y vayan a dormir en el mismo horario, para mantener horarios de sueño estables. La hormona del crecimiento (alojada en la glándula pituitaria) se produce en el cuerpo durante las primeras horas del sueño nocturno y en la fase profunda.
4. La columna vertebral es un factor clave en el crecimiento de tu hijo, por lo que necesita una buena postura. Designa un espacio en tu hogar equipado con una silla ergonómica, una mesa a su altura, sin muchos distractores, etc. para que tus pequeños realicen sus tareas.
Para el tratamiento de niños con talla baja que no han crecido suficiente debido a que su cuerpo produce niveles insuficientes de hormona de crecimiento, Ayala Estrada indicó que: “Un menor que ya se encuentra bajo un tratamiento de hormona de crecimiento (somatropina), la adherencia al tratamiento es fundamental y hoy la tecnología permite que por medio de un dispositivo electrónico el especialista pueda medir el avance del tratamiento, así como los días y horarios de aplicación”. La somatropina es prácticamente la misma que la hormona de crecimiento humana natural, con la diferencia que ha sido producida fuera del cuerpo por un proceso llamado “tecnología de ADN recombinante”.
Finalmente, el doctor Ayala enfatizó sobre la importancia de continuar manteniendo la rutina de los niños lo más similar a su vida cotidiana, explicarles la situación actual, de manera que sientan tranquilidad y se sientan seguros en casa. Esto además de ayudarlos en su crecimiento o desarrollo físico, también lo hará en su salud mental.