Que legisladores respeten autonomía de UAEM, exige rector

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Alfredo Barrera Baca, rector de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM) emitió una carta un grupo de diputados de MORENA y el Partido del Trabajo (PT) de la LX Legislatura del Estado de México encabezados por Max Correa Hernández advirtiendo que sus pronunciamientos y señalamientos de acoso laboral, y de detrimento académico y científico en la institución, no cuentan con sustento, además de vulnerar su autonomía.

Respaldado por el Consejo Universitario, el texto se dio a conocer la mañana de lunes en las diversas cuentas oficiales de redes sociales; ello en respuesta al último pronunciamiento que desde el pleno realizó el morenista, Max Correa, donde asegura que en la universidad se estaban registrando diversas violaciones de derechos laborales y universitarios tanto de académicos como de alumnos, así como corrupción dentro de las institución supuestamente dada a conocer a través de la investigación denominada “Estafa Maestra”, entre otra serie de acusaciones.

El rector advierte que la fundamentación legal utilizada en el Congreso por el legislador no le permiten realizar los pronunciamientos en contra de la Universidad, y hacer uso de la máxima tribuna para reproducir opiniones sin sustento y emitir juicios de valor en contra de la UAEM con base en las versiones de algunos universitarios que militan en este partido no es la opinión de una comunidad integrada por 94 mil universitarios alumnos, académicos y administrativos.

Añade que estos pronunciamientos hechos por un pequeño grupo de diputados de MORENA y el PT pretenden vulnerar la autonomía de la universidad para obtener un provecho político, sobre todo porque existen rankings que han evaluado los programas y el desempeño de la institución.

Barrera Baca hizo un llamado a este grupo de legisladores para que retomen “el camino de la prudencia y respeten en los hechos la autonomía de la institución, al tiempo que advierte a la comunidad universitaria un intento de división y vulneración propiciada por intereses personales o partidarios.

Finalmente convoca al Poder Legislativo a establecer una agenda de trabajo que sume esfuerzos, desde sus ámbitos, a fin de formar ciudadanos empáticos con las grandes causas nacionales y de la humanidad.